Una ola de 23 suicidios en la empresa France Telecom conmueve a Francia y es el traumatizante símbolo de la crisis económica y laboral. Los despidos, las transferencias intempestivas, las deslocalizaciones, los retiros forzados, y un cambio radical de management han traído como dramática consecuencia que 23 empleados eligieran quitarse la vida y otro lo intentara en los últimos 18 meses, en una compañía donde trabajan 65.000 personas. Solo desde julio siete trabajadores se han quitado la vida.France Telecom es una compañía que estuvo en la Argentina, pero luego vendió su parte a la familia Werthein. El último drama fue el viernes pasado en la rue Mederic, en París. Stephanie X, una empleada de Orange, la operadora de internet y celulares de France Telecom, se lanzó por la ventana del cuarto piso. El suicidio se produjo después de una reunión donde reestructuraban su sección y ella era transferida a la órbita de otro jefe. Stephanie estaba bajo tratamiento médico y la ayuda de asistentes sociales antes de su muerte, en un estado de intensa fragilidad emocional, según fuentes de la empresa. Era su tercer cambio en una compañía en permanente reestructuración desde que fue privatizada.Su muerte no fue instantánea. Sus compañeros vieron su agonía en la vereda y recién iba a morir dos horas más tarde. En Troyes, sudeste de París, dos días antes, un empleado de 52 años se había clavado un cuchillo en el estómago, en una reunión con sus jefes, cuando le anunciaron su despido. Lo salvaron en el hospital.Otro trabajador de 52 años se suicidó en Marsella el 14 de julio, con una carta de despedida, donde acusa a la empresa de un "management de terror". "Yo me suicido por mi trabajo en France Telecom. Esa es la única razón". Las tentativas de suicido suman 13 casos.El gobierno ha intervenido y el ministro de Trabajo, Xavier Darcos, convocó al presidente de FT, Didier Lombard, para discutir hoy cómo ayudar a los trabajadores frente al stress y el desaliento.Francois Chereque, secretario general de la Confederación Francesa Democrática de Trabajo, dijo que cada suicidio era "un grito de pedido de ayuda ante un problema vinculado al lugar". La ministra de Economía Christine Lagarde consideró que la empresa "debe llamar de urgencia a una reunión de directorio". El ministerio seguirá de cerca la ola de suicidios. Los sindicatos y trabajadores de France Telecom relacionan los suicidios con un programa de modernización de la compañía, que forzó a 10.000 empleados a cambiar de trabajo en los últimos tres años, con personal técnico siendo desplazado a puestos en oficinas de ventas y call centers.
Esto ocurre en Francia, ¿y en España?. ¿Cuantos suicidios se ha cobrado la crisis?, o ¿cuantos se va a cobrar?. La marcha de Solbes no augura nada bueno, y por si fuera poco las noticias sobre ERES y quiebras de empresas se van sucediendo dia a dia.
Los Globos de la Gripe A y demas esperpentos mediaticos, se van deshinchando ¿cual sera el nuevo señuelo con el que van a distraer nuestra atencion?
3 comentarios:
Había visto la noticia y me quedé asombrada, también me paso por la cabeza si aquí aunque no se diga, habrá gente que se haya o esté pensando en quitarse la vida por el mismo motivo el trabajo.
A mi no se distraen con otras cosas, sigo pesando que por algún lado todo va a reventar.
Y espero que reviente no podemos quedarnos parados lo peor no ha pasado de eso estoy segura.
Aquí han cerrado varias empresas y no hay día movilizaciones de curritos pidiendo se pare. Lo único que consiguen que la gente pare y los mire. Todos a la calle era lo que había que hacer. Igual me pongo demasiado radical.
Pero todo se contagia y no quisiera ver noticias como estas donde vivo. Es muy desesperante estar sin nada. Y detrás cartas y cartas reclamando lo que se no se puede pagar.
Bueno lo dejo que desvarío ya.
Un saludo
Cuando te quitan el suelo sobre el que pisas y entras en un precipìcio y nadie te ayuda, es jodido.
Creo que muchos no se han quitado la vida porque tienen hijos y como sea hay que seguir luchando.
Será la crisis, no?
Lo solucionan todo con eso.
Joe, que mal rollo
Besicos
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